Una de las intransferibles singularidades del sistema de fuentes del Derecho del Trabajo consiste en que es precisamente allí donde se expresa el modo en que una de ellas circunscriben las aptitudes regulatorias de las otras; en otras palabras, el modo en que se materializan las limitaciones al ejercicio de la autonomía de la voluntad; limitaciones que constituyen, a su vez la más generalizada de las técnicas de las que se sirve el régimen jurídico de la protección de los trabajadores dependientes. 1 volumen, rústica, edición 2004.